UNIDAD 17: LA ESPAÑA ACTUAL



CONTENIDOS

PRESENTACIÓN



EXAMEN:
  • Ordenar cronológicamente los presidentes del gobierno a partir de 1982.
  • Conocer al menos un hecho o característica del gobierno de esos presidentes.
  • Conceptos y personajes para relacionar o definir:
    • Adolfo Suárez.
    • Juan Carlos I.
    • Felipe González.
    • José María Aznar.
    • José Luis Rodríguez Zapatero.
    • PCE.
    • UCD.
    • PSOE.
    • PP.
    • Pactos de la Moncloa.
    • Matanza de Atocha.
    • Harakiri político.
    • 23-F.
    • Entrada de España en la OTAN.
    • Entrada de España en la CEE.
    • Ley para la Reforma Política (1976).
    • Constitución de 1978.


 



CONTENIDOS DEL TEMA:

17.1. LAS FUERZAS DE LA TRANSICIÓN

Tras la muerte de Franco en 1975, y según lo establecido por él, se restableció la monarquía después de más de 40 años, mediante la figura de Juan Carlos I, nieto de Alfonso XIII. Así, el rey asumió el cargo de Jefe de Estado, en un escenario político que se presentaba dividido en diferentes grupos:

·        Franquistas, divididos entre los “inmovilistas" y los "aperturistas", como hemos visto anteriormente.

·        Grupos minoritarios de derecha, como monárquicos, liberales y democristianos.

·         Fuerzas de izquierda, como el Partido Comunista de España (PCE), dirigido por Santiago Carrillo, y el Partido Socialista Obrero Español (PSOE), que había celebrado un Congreso en Suresnes (Francia) en 1974 en el que Felipe González se erigió líder y remodeló el partido para abandonar sus principios marxistas-leninistas.

·        Partidos nacionalistas regionales, que podían tener ideologías tanto de derechas como de izquierdas.

En el sindicalismo, Comisiones Obreras (CC.OO.), vinculada al PCE, fue el sindicato más poderoso; mientras que la Unión General de Trabajadores (UGT), ligada al PSOE, comenzaba a recobrar importancia. La histórica CNT quedaría en un segundo plano tras acciones violentas, como el caso Scala (cuando un grupo de cenetistas arrojó cócteles molotov en la sala de fiestas Scala, que quedó en llamas.

En este contexto, el nuevo rey comenzó un proceso que transformaría el sistema político de la dictadura franquista en una democracia equiparable a las de otros países occidentales. Este proceso se conoce como la Transición, y duró en torno a dos o tres años. En 1977 se celebraron las primeras elecciones, y un año después se aprobó la Constitución de 1978, que consolidó la democracia y continúa vigente hoy.

 

17.2. LOS GOBIERNOS PREDEMOCRÁTICOS

EL GOBIERNO DE ARIAS NAVARRO (1975-1976)

Los primeros momentos de la monarquía de Juan Carlos I fueron muy inciertos: no se sabía si la monarquía sería un “franquismo sin Franco”, o si sería el comienzo de algo nuevo. El primer ministro durante los últimos años de Franco se llamaba Carlos Arias Navarro, y continuó en su cargo con Juan Carlos I. Pero no duró mucho tiempo, porque Juan Carlos mostró que sí pensaba realizar cambios, y esos cambios pusieron a muchos en su contra. También estaban contra los cambios el propio Arias Navarro y su gobierno, que eran defensores del sistema franquista y veían que ahora todo estaba en peligro. Así, el Rey destituyó a Arias Navarro de su cargo y buscó a una persona de confianza, que le permitiría llevar a cabo su proyecto de la transición política: Adolfo Suárez.

EL GOBIERNO DE ADOLFO SUÁREZ (1976-1977)

Muchos pensaron que Suárez, por su pasado dentro del franquismo, no era el hombre adecuado para liderar el proceso hacia la democracia. Sin embargo, en septiembre de 1976, Suárez presentó el proyecto de Ley para la Reforma Política, que fue aprobado por las mismas Cortes franquistas, lo que significaba el desmantelamiento del franquismo desde dentro del propio régimen, es decir, un “suicidio” político de los herederos de Franco. Por eso, se conoce esta votación de las Cortes en 1976 como el “harakiri político”.

La Ley para la Reforma Política fue ratificada en referéndum, lo que le daba el soporte social necesario para su desarrollo. Paralelamente, Suárez inició contactos discretos con la oposición, que poco a poco fue saliendo de la clandestinidad. La legalización del PCE en 1977 y la amnistía a los presos políticos no acusados de terrorismo fue el paso definitivo para poder convocar las elecciones de 1977, las primeras elecciones democráticas en más de 40 años. Este es uno de los momentos clave en la Transición, como hemos visto en el punto anterior.

 

17.3. EL GOBIERNO DE LA UCD (1977-1982)

Las primeras elecciones democráticas de la Transición se celebraron en junio de 1977. La UCD (Unión del Centro Democrático), dirigida por Adolfo Suárez, obtuvo el 34.5% de los votos, proclamándose el partido ganador. Era un partido democristiano en el que se agrupaban los aperturistas del franquismo con algunos demócratas moderados. El segundo partido fue el PSOE de Felipe González, con casi el 30% de los votos, que se hizo con la hegemonía en la izquierda muy por delante del PCE, que obtuvo un 9.4%. Alianza Popular, como partido heredero de los franquistas moderados y con Manuel Fraga como líder, obtuvo solo el 8% de los votos.

Adolfo Suárez tuvo que hacer frente a los graves problemas políticos, económicos y sociales de esos años. Para ello se reunieron los agentes sociales que sustentaban el nuevo sistema: partidos políticos, patronal y sindicatos. Estas reuniones de octubre de 1977 se conocen como los Pactos de la Moncloa, y en ellas se acordaron diversas medidas consensuadas para afrontar las graves dificultades políticas, sociales y económicas del momento.

El siguiente paso era elaborar una nueva Constitución que regulase el nuevo marco democrático. Pero para ello era necesario resolver el asunto de las identidades nacionales dentro del Estado español. Así que se diseñó un cuerpo legislativo autonómico o Estado Autonómico, sobre el que los territorios y regiones españolas tuviesen un marco de autonomía respecto del Estado central. El texto fue sometido a referéndum el 6 de diciembre de 1978. La Constitución de 1978 quedó aprobada con un 58% de votos a favor y una abstención del 33% en la que, entre muchas cosas, se establecía:

  • Un Estado social y democrático de derecho.
  • Una monarquía parlamentaria bicameral.
  • Un Estado organizado en Comunidades Autónomas.
  • La división de poderes entre el legislativo, el ejecutivo y el judicial.
  • Una declaración de derechos y deberes como: la libertad de religión, de pensamiento, reunión y prensa; la prohibición de la pena de muerte; la libertad de asociación; etc.

 

17.4. LOS PROBLEMAS DE LA UCD

Las reformas de Adolfo Suárez se enfrentaban a varios problemas, como la grave crisis económica, el alto nivel de paro y la inflación monetaria; pero su mayor amenaza vino por fuerzas antidemocráticas. La situación empeoró en enero de 1977, cuando una sucesión atentados y asesinatos estuvieron a punto de acabar con la Transición. Con la matanza de Atocha, en la que cinco abogados laboralistas del PCE fueron asesinados por un grupo de pistoleros de extrema derecha, la tensión llegó a su punto máximo. La respuesta pacífica de los comunistas y del resto de la sociedad hizo posible continuar con la reforma democrática.

Tras la dimisión de Adolfo Suárez como presidente del Gobierno, en 1981, el rey propuso a Calvo Sotelo como sustituto. Mientras se votaba a Calvo Sotelo como nuevo presidente, se produjo el intento de golpe de Estado del 23 de febrero de 1981, conocido como 23-F. Un grupo de guardias civiles, dirigidos por Antonio Tejero, entraron en las Cortes y secuestraron a los parlamentarios que constituían el poder legislativo y ejecutivo. El capitán general de Valencia, Jaime Milans del Bosch, salió con los tanques a las calles de Valencia y declaró el estado de guerra. El golpe no contó, sin embargo, con el apoyo unánime del Ejército.

El momento decisivo llegó en la madrugada del 24 de febrero, cuando el rey se dirigió a los ciudadanos por la televisión, explicando que había ordenado a los altos cargos militares la sumisión al orden constitucional y el fin del golpe. Este es uno de los acontecimientos más relevantes de la Transición, y también uno de los más polémicos, ya que no ha sido posible saber (y seguramente nunca lo será) quién fue el verdadero organizador del golpe. Sus objetivos parecen más o menos claros: tomar el control del gobierno por la fuerza en este momento de crisis. Es probable que el general Alfonso Armada, uno de los militares más cercanos al Rey, fuera el organizador de todo el plan para imponer su propio gobierno (el propio Rey podría conocer este plan, aunque no existen evidencias de ello). Pero Armada quería un golpe sin violencia, y cuando Tejero disparó sus armas en el Congreso decidió dejar de apoyarlo. Sea como sea, está claro que la intervención del Rey en la televisión fue la confirmación de que este golpe de Estado estaba condenado al fracaso.

 

17.5. LOS GOBIERNOS SOCIALISTAS Y POPULARES

Tras la dimisión de Adolfo Suárez, en el corto gobierno de Calvo Sotelo (1981-1982) se produjo el polémico ingreso de España en la OTAN (Organización del Tratado del Atlántico Norte) el 30 de mayo de 1982. Según el diario El País, tan solo un 18% de la población apoyaba esta decisión. Meses más tarde, el 28 de octubre de 1982, las elecciones dieron el poder al PSOE (1982-1996). Una de las principales promesas de los socialistas era la celebración de un referéndum para decidir la salida de la OTAN.

LOS AÑOS DEL “FELIPISMO” (1982-1996)

El Gobierno de Felipe González siguió combatiendo la crisis económica. El gabinete socialista aprobó una reconversión industrial que llevó a cerrar muchas industrias tradicionales. Esto era necesario para sanear la economía, pero supuso un trauma a corto plazo. Además, a pesar de toda su política anterior contra la OTAN, se convocó un referéndum en 1986, pero esta vez haciendo campaña activa A FAVOR de la OTAN, lo que muchos votantes consideraron una traición. Finalmente, España siguió en esta organización (hasta hoy). También en 1986, España firmó el ingreso en la CEE (Comunidad Económica Europea) hoy denominada UE (Unión Europea).

LOS GOBIERNOS DEL PP CON AZNAR (1996-2004)

El Partido Popular de José María Aznar, compuesto por la derecha conservadora y la liberal, ganó finalmente las elecciones de 1996 contra un Felipe González desgastado, después de casi 14 años en el poder. Durante el mandato de Aznar, se privatizaron empresas antes gestionadas por el Estado, como Repsol, Endesa o Telefónica. Además, el 11 de marzo de 2004 (el llamado 11-M), tres días antes de las elecciones, tuvo lugar el peor atentado terrorista de la historia de España, en la estación de trenes de Atocha (Madrid). Murieron casi 200 personas inocentes. Se pensó que el atentado había sido organizado por islamistas, tras la entrada de España en la guerra de Irak en 2003. Por eso, contra todos los pronósticos (el PP iba a ser el ganador según las estadísticas), ganó las elecciones un personaje casi desconocido: José Luis Rodríguez Zapatero, del PSOE. Curiosamente, nunca se ha llegado a demostrar definitivamente quién organizó este terrible atentado, cuyo objetivo parece ser sin duda influir en las elecciones, es decir, que el PP no gobernase de nuevo.

LOS GOBIERNOS DE ZAPATERO (2004-2011)

José Luís Rodríguez Zapatero gobernó durante dos legislaturas, es decir casi ocho años. En la primera, la estabilidad económica permitió desarrollar un programa político de aspecto progresista en lo social: legalización del matrimonio homosexual, reforma de los Estatutos de Autonomía como el catalán, etc. Su segunda legislatura (desde 2008), estuvo marcada por la crisis financiera mundial. Afectó especialmente a las “cajas” (bancos públicos) y a la construcción, por la gran especulación, conocida como la “burbuja inmobiliaria”. Sin embargo, se continuó ampliando el gasto público, hasta que el dinero se terminó y Zapatero tuvo que comenzar con los llamados “recortes” presupuestarios. La situación económica y la presión social le obligaron a adelantar las elecciones, que en 2011 llevaron de nuevo al poder al PP de Mariano Rajoy, un antiguo ministro de Aznar.

 


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