UNIDAD 16: EL FRANQUISMO (1939-1975)

CONTENIDOS

PRESENTACIÓN

KAHOOT



EXAMEN:

• Explicar las diversas posturas de Franco en la Segunda Guerra Mundial.
• Conocer cuáles fueron las principales consecuencias de la Guerra Civil.
• Conceptos para relacionar:
• Nacionalcatolicismo.
• Movimiento Nacional.
• Marcha Verde.
• División Azul.
• Sindicato Vertical.
• Carrero Blanco.
• Comisiones Obreras (CC. OO.).
• Cartillas de racionamiento.
• Estraperlo.
• Leyes Fundamentales.
• Plan de Estabilización (1959).
• Autarquía.
• Tecnocracia.
• Aperturismo.
• Desarrollismo.
• Maquis.
• Entrada de España en la ONU.
• Concordato con el Vaticano (1953).
• ETA.
• Aperturistas contra inmovilistas.

CONTENIDOS DEL TEMA:

16.1. LA IMPLANTACIÓN DE LA DICTADURA FRANQUISTA

La posguerra fue un período muy duro por la miseria económica y la persecución de los no adeptos al régimen. Se produjeron fusilamientos sumarios, torturas, y requisamientos de bienes de los que habían colaborado o simpatizado con el Frente Popular. En los primeros años, se implantó una represión social, económica, religiosa y cultural. Se suprimieron las libertades de reunión y afiliación. Además, la censura estuvo presente en todos los ámbitos de la sociedad: la dictadura ejerció todo su poder para prohibir la difusión de noticias, libros o cualquier información disidente respecto de los principios del régimen.

Antes de acabar la guerra empezó el mayor exilio de la historia de España. La mayoría de los intelectuales huyó a Francia, México y la URSS, entre otros países. En conjunto, se calcula que hubo más de quinientos mil exiliados. Aunque algunos fueron retornando durante la dictadura, muchos no volvieron o lo hicieron a la muerte de Franco, en 1975. Destaca el caso de los llamados “niños de Rusia”, un total de casi 3000 niños acogidos por la Unión Soviética para evitarles el sufrimiento de la guerra (aunque después tuvieron que vivir la Segunda Guerra Mundial allí…). Unos pocos de ellos aún viven actualmente en Rusia.

Las bases ideológicas de la Dictadura se pueden resumir en estos puntos básicos:

·         Concentración del poder político en Franco, quien se convirtió así en una figura “omnipotente”.

·         Anticomunismo. El golpe de Estado se basó desde el principio en el rechazo al Frente Popular, organizado desde la Komintern soviética. Más tarde, durante la Guerra Fría entre EE. UU. y la URSS, esto le sirvió a Franco para ser aceptado por el bloque occidental.

·         Militarismo y simbología fascista. En los primeros años, abundó el patriotismo militar exhibido en desfiles, uniformes, himnos, bandera, etc. Tras las primeras derrotas del Eje (Berlín, Roma, Tokio) estos símbolos se fueron sustituyendo para lograr la aceptación internacional, mediante un “lavado de cara”.

·         Nacionalcatolicismo. La Iglesia católica fue la gran aliada de la dictadura franquista, y dominó la vida social, cultural y la educación.

Las bases políticas de la Dictadura se basaron en las Leyes Fundamentales, que pretendían dar un aspecto democrático al totalitarismo. Algunas de las más importantes fueron el Fuero del Trabajo (1938), a imitación del fascismo italiano; el Fuero de los Españoles (1945); la Ley de Sucesión en la Jefatura del Estado (1947); etc. Se prohibieron los partidos políticos, asociaciones ciudadanas y sindicatos obreros, y se controló el país a través de instituciones orgánicas del régimen, como: el partido único (FET-JONS), el Frente de Juventudes, la Sección Femenina y la Organización Sindical Española (OSE) conocida como el “Sindicato Vertical”, al que todos los trabajadores pertenecían obligatoriamente. En definitiva, todo este sistema de instituciones se denominó “Movimiento Nacional”. Ese término englobaba todo lo referente a la imagen de una sociedad oligárquica basada en el modelo tradicional de “la familia, el municipio y el sindicato”.

 

16.2. LA POSGUERRA Y LA AUTARQUÍA

La situación de España tras la Guerra Civil era desoladora, por la hambruna y la destrucción material del país. Sin aliados después de 1945, y con un régimen basado en una ideología nacionalista, se implantó una economía autárquica. La autarquía es una política económica basada en la autosuficiencia, es decir, en la limitación del comercio internacional. El país debe producir todo lo que necesita. Pero estas políticas llevan a la escasez y la pobreza, y esta no fue una excepción: la producción agrícola e industrial bajó tanto que Argentina tuvo que enviar trigo a España, y se hicieron necesarias las cartillas de racionamiento. De ese modo, el mercado negro o estraperlo hizo mella en la sociedad española. Fueron años muy duros para todos los que tuvieron que vivir esta triste época de la Historia reciente.

En el inicio de la II Guerra Mundial, Franco declaró su neutralidad, y en 1940, ante las victorias implacables del Eje, se decantó por la no intervención, es decir, pasó de “neutral” a “no beligerante”. Este término era una especie de “truco”, que le permitía ayudar a Alemania e Italia, pero sin participar directamente con el ejército español. Hitler, y más tarde Mussolini, se entrevistó personalmente con Franco, para recordarle la ayuda alemana e italiana durante la Guerra Civil, y exigir así que participara en la guerra. Cuando los alemanes invadieron la URSS en 1941, Franco envió allí a la División Azul, formada por unos 60.000 voluntarios españoles, que combatieron en Leningrado. Esa fue toda la ayuda que Franco aceptó enviar, y más tarde pudo escapar de sus compromisos: a partir de 1943, con las crecientes derrotas ítalo-alemanas, el régimen declaró la neutralidad de nuevo y se alejó poco a poco de este conflicto.

Los países occidentales no se enfrentaron al régimen franquista, aunque sí existió un aislamiento internacional hasta los años cincuenta por haber apoyado a las potencias fascistas del Eje. Pero a partir de 1950, en plena Guerra Fría, España entró en un período de aperturismo, reflejado en los acuerdos con EE. UU. y el Vaticano. EE. UU. hizo las gestiones necesarias para que se levantara el aislamiento internacional al franquismo, a cambio de permitir la construcción de 4 bases militares norteamericanas en su territorio, y en 1953 se firmó el Concordato con el Vaticano. La Asamblea General de la ONU acabó aceptando la posición estadounidense a favor del gobierno franquista, y en 1955 se produjo la entrada de España en la ONU.

 

16.3. LOS AÑOS 60

Tras el ingreso de España en la ONU y el fin del aislamiento, se formó en 1957 un gobierno de técnicos economistas, llamados “tecnócratas”, vinculados al Opus Dei. Así se llevó a cabo el Plan de Estabilización de 1959, que liberalizó la economía para introducirla en el mercado global capitalista. Es decir, se olvidó definitivamente la política de autarquía de los primeros años del régimen. De esa forma, España experimentó un crecimiento acelerado desde los años 60, lo que inició el período llamado Desarrollismo, caracterizado por:

ü  La modernización agrícola.

ü  La expansión industrial, ayudada por la inversión extranjera.

ü  El crecimiento demográfico (baby boom).

ü  El éxodo rural: los jóvenes abandonan el campo para dirigirse a las grandes ciudades españolas (éxodo interno) o a Europa (éxodo externo) principalmente a países como Alemania, Francia, Bélgica o Suiza, lo que supuso grandes envíos de divisas. Ciudades como Madrid o Barcelona recibieron gran cantidad de población en poco tiempo, lo que propició la aparición del chabolismo en la periferia de las ciudades (como hemos visto en Geografía), ya que no se podía construir viviendas tan rápido como llegaba la población.

ü  El turismo de masas, que equilibró la balanza de pagos, al cubrir hasta el 80 % del déficit comercial. Spain is different se convirtió en el eslogan para atraer a la clase media europea, y las películas de la época reflejaban el furor que causaban las turistas suecas y sus bikinis en las playas españolas.

ü  La modernización social, con la generalización de los electrodomésticos y la televisión en los hogares, los primeros automóviles utilitarios como el Seat 600 y la moda “ye-ye” en la vestimenta y las costumbres.

 

16.4. EL FINAL DEL RÉGIMEN

Desde los años 60, Franco envejecía progresivamente y estaba claro que solo la muerte le apartaría del poder. Dentro del franquismo, se diferenciaron dos facciones:

·         Los aperturistas: sector formado por la mayoría de los tecnócratas del Opus Dei, por jóvenes del régimen como Manuel Fraga y Adolfo Suárez y también algunos veteranos como José María de Areilza, que creían en la necesidad reformar la Dictadura para que continuase tras la muerte de Franco.

·         Los inmovilistas: también conocidos como el “búnker”, formado por excombatientes y grupos ultraderechistas y falangistas como Fuerza Nueva, que no querían ninguna apertura y que se aferraban a la frase de Franco en su mensaje de Navidad de 1969: “todo está atado y bien atado”.

Surgieron varias formas de oposición a la Dictadura, como fue la aparición de sindicatos clandestinos, el movimiento estudiantil, los sectores católicos obreros y la oposición nacionalista en Cataluña y el País Vasco. En la calle, estos grupos de oposición desbordan al régimen, y el Gobierno responde solo con represión policial e imponiendo el estado de excepción. Sin embargo, podemos afirmar que en general esta oposición era minoritaria en el conjunto de la sociedad. La buena situación económica daba un gran apoyo al régimen, y en efecto este solo terminó cuando Franco dejó de existir físicamente. Los últimos años de Franco fueron bastante convulsos en varios aspectos, como por ejemplo:

·         El atentado a Carrero Blanco en 1973 por parte de ETA. Se trataba de la mano derecha de Franco en ese momento. Su violenta muerte fue un shock para el régimen en sus últimos años.

·       El enfrentamiento del régimen franquista con la Iglesia, liderada por el obispo Enrique y Tarancón, a partir de las nuevas ideas del Concilio Vaticano II.

·         La ejecución de terroristas, miembros de la ETA y el FRAP, que producen protestas internacionales.

·         La Marcha Verde, organizada por el rey marroquí Hassan II durante la agonía de Franco. Una multitud de marroquíes ocupó el Sahara español y obligó al ejército español a evacuar el lugar. El conflicto continúa hoy, ya que los saharauis llevan esperando más de 40 años un referéndum para independizarse... de España (pero ya no hay españoles allí, es un país ocupado por Marruecos y Mauritania).

 

Finalmente, y tras una larga hospitalización, el 20 de noviembre de 1975 muere Franco y se inicia el camino hacia la transición democrática en España, de la mano de su sucesor, el rey Juan Carlos I.

 

16.5. LOS GRUPOS DE OPOSICIÓN

La guerrilla antifranquista o Maquis fueron grupos de guerrilleros republicanos que, tras la ocupación de las tropas golpistas de Franco en las diferentes regiones del país, huyeron de la represión y se echaron al monte formando grupos de resistencia, organizados y controlados por el Partido Comunista de España, que envió también nuevos hombres a través de la frontera. Su actividad guerrillera aumentó tras la derrota nazi en 1945. La dura represión y la falta de colaboración extranjera llevaron a su decadencia a partir de 1948, y a su fin con la muerte de los últimos guerrilleros en los años 60.

En los años 60, la oposición universitaria estudiantil, junto a los obreros, los “curas obreros” y parte de la sociedad civil, empezaron a ser una molestia creciente para el régimen. El Partido Comunista de España (PCE) aprovechó las fisuras legales que permitía la legislación franquista y se fue infiltrando en la organización del Sindicato Vertical. De esa manera, con el impulso del PCE y algunos movimientos cristianos obreros, entre otras fuerzas políticas, nació hacia 1962 el sindicato Comisiones Obreras (CC.OO.). Otros sindicatos históricos, como la UGT y la CNT, apenas tuvieron presencia interna durante la Dictadura.

Los movimientos nacionalistas se reforzaron en diversas capas sociales de Cataluña. En el País Vasco, un grupo de jóvenes escindidos del PNV fundaron en 1959 la organización ETA, que responde a Euskadi ta Askatasuna, en vasco Euskadi y Libertad. Esta organización era una reacción contra la pérdida de identidad del pueblo vasco y contra la represión franquista. Este grupo comenzó las acciones armadas a partir de 1967 y fue acrecentando su protagonismo con acciones terroristas, que duraron hasta 2011 y provocaron en total 829 muertes.